“Bonito hotel boutique de moda en el corazón del centro de Baltimore, a un par de cuadras del estadio local de los Orioles, Camden Yards. Desafortunadamente, está en una parte muy mala de la ciudad. El hotel no tiene estacionamiento, por lo que su única opción es estacionar en uno de los garajes públicos alrededor de la cuadra y esperar que su automóvil todavía esté allí cuando regrese. Las habitaciones son agradables aunque un poco oscuras y carecen de comodidades. Aunque el sitio web dice que el registro es a las 2:00 p. m., puede tomar una hora más antes de que lo configuren con su habitación. No estoy realmente seguro de por qué ese es el caso. Reservamos una habitación para 4 personas, pero solo había 2 botellas de agua y un vaso de papel para la máquina de café de servicio individual tipo Keurig en la habitación. Ni siquiera una cuchara para revolver tu café. El televisor estaba desconectado detrás del soporte de pared y nos tomó un tiempo descubrir cómo ponerlo en marcha. La habitación no tiene caja de seguridad para sus objetos personales. Entonces, si viaja con dinero extra, pasaportes, etc., tendrá que averiguar algo. Este no es un buen hotel para familias. Realmente no hay nada que hacer aquí. Sin piscina, sin actividades. Hay un gimnasio y una especie de bar en el vestíbulo, pero parece que no funciona. Además, nuevamente, estás en una parte mala de la ciudad, por lo que probablemente no quieras dar un paseo nocturno para ver la vida nocturna. Sin embargo, hay un guardia en la puerta, pero parece estar más interesado en su teléfono que en ver quién entra o sale del edificio. El vestíbulo parece ser un lugar frecuentado por la noche para los lugareños de la calle. En general, realmente no recomendaría este hotel a menos que viaje solo por negocios y solo necesite un lugar para descansar. Hay opciones mucho mejores en Baltimore para familias.”

“Nice trendy boutique hotel in the heart of downtown Baltimore, a couple of blocks from the Orioles home stadium, Camden Yards. Unfortunately, it's in a very bad part of town. The hotel doesn't have any parking so your only option is to park in one of the public garages around the block and hope your car is still there when you get back. The rooms are nice albeit a bit dark and lacking amenities. Although the website says check in is at 2pm, it can take an extra hour before they get you set up with your room. Not really sure why that is the case. We reserved a room for 4 people but there were only 2 bottles of water and one paper cup for the Keurig-like single serving coffee machine in the room. Not even a spoon to stir your coffee. The TV was disconnected behind the wall mount and it took us awhile to figure out how to get it going. The room doesn't have a safe for your personal items. So if you're travelling with extra cash, passports, etc...you'll need to figure something out. This is not a good hotel for families. There's really nothing to do here. No pool, no activities. There is a gym and some sort of bar in the lobby but doesn't seem to be working. Also, again, you're in a bad part of town so you probably don't want to take an evening stroll to check out the nightlife. There is a guard at the door though but he seemed to be more interested in his phone than watching who is entering or exiting the building. The lobby seems to be an evening hangout for the locals off the street. Overall, I would not really recommend this hotel unless you're travelling alone for business and just need a place to crash. There are far better options in Baltimore for families.”